Folleto Turístico

martes, 30 de julio de 2019

El Puente de la Madre.





Villarrodrigo. Topónimos. Puente de la Madre.

Entre los topónimos que nos encontramos en la documentación histórica está el Puente de la Madre, que hoy recibe el mismo nombre. Estaba sobre el río Villarrodrigo (río Madre o río del Tobar) en lo que hoy llamamos camino del Soto.

Para nuestros antepasados era un puente muy transitado, ya que el camino que iba por la Cruz del Tirador (hoy Cruz del Tirao) pasaba por el Chorreadero (hoy Chorrillo) cruzaba el Puente de la Madre y llegaba hasta al Lavadero Público, que estaba en lo que hoy llamamos Fuente del Lavadero, que tenía unas pilas de madera, a modo de tornajos (Primitivo Cifuentes aún se acuerda de acompañar a su abuela en sus labores de lavandera), y este camino continuaba hasta la ermita de Santa Quiteria.

En la carretera de Onsares, hoy hay otro puente al que llamamos Puente de la Cuesta de la Madre, que está más arriba del Puente de la Madre.

Puente de la Madre

Por escritura de 1687 se donaba a Nuestra Señora de Albanchez “una huerta en la Cuesta de la Madre a la derecha que posee Antonio Solano, y linda con la Cuesta, con el Puente, y por arriba, Antonio de Gracia, con huerto de dicho Solano, y derrame de la fuente

Por escritura de 1659 se donó a la Capellanía de San Juan Bautista “bajo de las Toscas, que es una huerta de fanega y media de trigo arbolada, y alinda por arriba con Juan Gómez Vezarez, por mediodía el Río, por poniente huerta de Juan de Gracia que pega esta al Puente de la Madre, y por norte el camino de las Toscas o Zanja Madre”

Por escritura de 1651 se donaba también a la Capellanía de San Juan Bautista “una huerta de una fanega para trigo entre el camino que parte a las Toscas y a la Puente de la Madre, y con esta linda el Río arriba, y por saliente huerta de las monjas Dominicas” (de Alcaraz).

También por escritura de 1651 y reconocida en 1776 se donaba a la Capellanía de San Juan Bautista “una huerta en el Chorreadero, entre el camino de las Toscas y el del Puente de la Madre por mediodía, poniente y norte, por saliente alcacelar de las monjas Dominicas”.

En 1743 se reconoció una memoria por el testamento de Ana Serrano, mujer del escribano Juan López de Castro y para su cumplimiento dejó “un guerto en el Tirador, de caber fanega y media de zebada, con siete morales, que alinda con tierras de los herederos de Doña Sebastiana de Vico y con herederos de Pedro Muñoz y con el Río del Tovar y camino de las Riberas y Puente de la Madre”.

Puente de la Cuesta de la Madre